La dirigencia decidió despedir a Sebastián Battaglia después de la eliminación en octavos de final de la Copa Libertadores.
Quién será el técnico de Boca luego de la salida de Battaglia
Un día después de la eliminación de la Copa Libertadores en octavos de final, tras perder por penales frente a Corinthians, Boca Juniors decidió despedir a Sebastián Battaglia de la dirección técnica del primer equipo, algo que sorprendió ya que en el peor momento del Xeneize decidieron ratificarlo en el cargo, lo que derivó en que se consagrara campeón de la Copa de la Liga Profesional.
Y ahora, ante una eliminación que duele pero en la que Boca no fue superado por el rival en ninguno de los dos partidos de la serie, el Consejo de Fútbol lo despidió y, al parecer, los motivos son la tensa relación que mantenían con el entrenador y que tuvo como gota que rebalsó el vaso las declaraciones de Battaglia reclamando por la falta de refuerzos.
Rápidamente empiezan a sonar los nombres de los posibles candidatos a tomar la dirección técnica de Boca Juniors, con una sola certeza, la de quién será el DT el próximo sábado, cuando el Xeneize visite a San Lorenzo a las 15.30 en el Nuevo Gasómetro.
Como pasó cuando echaron a Miguel Ángel Russo, el DT de la Reserva se hará cargo del primer equipo. De manera que Hugo Benjamín Ibarra y Leandro Gracián dirigirán este fin de semana, por la séptima fecha de la Liga Profesional.
En principio, la idea es que sea sólo un interinato, pero puede pasar de todo, ya que con Battaglia también tenían esa idea y finalmente, como ganó la Copa Argentina, lo ratificaron en el cargo.
Y como la idea primigenia es que Ibarra tome el equipo momentáneamente, el Consejo de Fútbol ya piensa en otros nombres, y el candidato número uno es Ricardo Gareca.
El Tigre es un viejo deseo de Juan Román Riquelme, pero Boca no avanzó este año por él porque no se sabía si Perú clasificaría al Mundial de Qatar, algo que no sucedió y ahora el Flaco está disponible.
Gareca es un nombre muy resistido por el hincha de Boca, que no olvida que cuando era futbolista del club, junto a Oscar Ruggeri, ante la deuda que tenía la dirigencia en ese momento con ellos, ambos decidieron no sólo irse del Xeneize, sino hacerlo para jugar en River, el rival de toda la vida.