En la entrada en calor los fanáticos de la Selección explotaron con la presencia de sus ídolos. Los jugadores regalaron pelotas.
Messi, Dibu Martínez y Di María "ganaron" en la ovación de los hinchas
La previa se picó en el Estadio San Juan del Bicentenario. La tarde venía tranquila en cuanto a las emociones, pero los corazones explotaron cuando las selecciones de Argentina y Brasil pisaron el campo de juego para realizar la entrada en calor.
La Canarinha primereó a la Albiceleste y los visitantes fueron los primeros en aparecer, bajo un telón de silbidos que le dio la bienvenida de rigor a los dirigidos por Tité.
No obstante, la ebullición definitiva se dio cuando Lionel Messi encabezó la fila de futbolistas argentinos. Allí el estadio se sumergió en un único grito ensordecedor y carnavalesco. Toda la expectativa previa tuvo, en ese instante, su momento cumbre.
Allí comenzó el festival de ovaciones por nombre propio. Y obviamente el que ganó el torneo fue la Pulga, quien inmediatamente devolvió la gratitud con un tímido saludo. En segundo lugar quedó Dibu Martínez, el arquero, héroe en la Copa América.
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El podio lo completó Ángel Di María. El "Fideeeeeoooo, Fideoooo", empezó despacito pero termino tronando fuerte en los cuatro costados. El del gol en la final contra Brasil, vapuleado por los hinchas durante muchos años, se emocionó y saludó un largo rato con sus dos manos.
El broche de oro se dio cuando los futbolistas se retiraron a los vestuarios para cambiarse y salir a disputar el partido. Allí, todos regalaron las pelotas oficiales con las que hicieron la entrada en calor a los hinchas que estaban en las tribunas.
De esa forma, unos pocos afortunados, además de ver el clásico más importante del mundo, se llevaron ese increíble souvenir para sus casas.