Sebastián Morquio, quien ascendió con el Quemero en el 2000, escribió en Twitter: "Después si pasa algo no sean cínicos de decir había que ayudarme cuando ya no esté".
Un ex jugador se comparó con el Morro y lanzó una advertencia
Sebastián Morquio fue un rústico defensor que concluyó su carrera futbolística en el Deportivo Maipú de Mendoza, en el 2012. El uruguayo debutó como profesional en 1996, en Nacional de Montevideo, y tuvo una interesante carrera cuyo punto máximo se dio en Huracán, donde estuvo entre 1999 y el 2002 y consiguió el ascenso a Primera División en el 2000.
También jugó en Rusia, Ecuador, Perú, Chile y en el ascenso argentino. En nuestra provincia, además de vestir la casa del Cruzado, estuvo en San Martín, en el 2008.
En las últimas horas, "Patota" (tal como le decían por su porte grandota e intimidador) volvió a ser noticia por una serie de mensajes que publicó en Twitter a modo de advertencia y luego cuando brindó una entrevista en Radio Mitre de Buenos Aires, en donde incluso llegó a compararse con el Morro García y la situación que terminó con el suicidio de su colega y compatriota.
Conmoción: hallan muerto al Morro García
En la red social del pajarito, Morquio primero escribió: "Uno pide ayuda cómo puede. Después si pasa algo no sean cínicos de decir había que ayudarle cuando ya no esté!!!".
En la entrevista radial, agregó además que "¿Por qué sería una locura? Quizás sea una liberación.". Si bien el ex futbolista jamás mencionó la palabra suicidio, lo dio a entender en varias ocasiones. "Ayer fue García, hoy será Morquio y pasado otro", dijo.
"Lo del Morro pasó hace dos semanas y ya hoy no le importa a nadie A quién carajo le va a importar si a mí me pasa lo mismo, en dos o tres días se olvidan", sentenció.
En otro tuit, Morquio pidió trabajo y advirtió: "Pido ayuda porque no quiero hacer una cagada y que mi familia sufra". En la entrevista, en tanto, aclaró que "no le dan los huevos para hacerlo".
"Patota" está desempleado, su ex pareja no le permite ver a su hija y además está procesado por un incidente entre su perro y su madre. Estuvo preso un mes y ahora tiene prisión domiciliaria de 00 a 6 horas.