En el encuentro entre Instituto y Banfield, tras un choque, el arquero del "Taladro" asustó a todos al olvidar donde estaba y qué hacía.
"Mi mamá no me deja": la insólita respuesta de un jugador al árbitro
A raíz de trágicos episodios vividos en el fútbol mundial que alertaron sobre la salud de los futbolistas en el campo de juego, los árbitros se toman muy en serio los golpes que reciben los jugadores en la cabeza. Eso fue lo que pasó con el arquero de Banfield, Facundo Cambeses, al golpearse la cabeza en el partido ante Instituto.
Banfield conseguía un importante empate para sus aspiraciones de mantener la categoría y su arquero, Facundo Cambeses estaba siendo la gran figura de su equipo.
Cerca del final del encuentro, Cambeses sale a descolgar un centro del equipo cordobés que cayó a su área, chocó con un rival y cayó de mala manera sobre el césped, quedando tendido y visiblemente afectado, ya que no se movía.
Inmediatamente, el árbitro del partido, Andrés Merlos, paró el encuentro y fue a ver cómo se encontraba el portero del Taladro y decidió llamar al cuerpo médico del equipo bonaerense.
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Después de un par de minutos, donde el arquero se veía visiblemente conmocionado, decidieron pedir al cambio al banco de suplentes. En ese momento, Cambeses rompe en llanto y empieza a hacer señas de que no quería salir.
Finalmente, el arquero se recuperó y siguió jugando y terminó siendo fundamental, ya que asistió desde 50 metros, con la mano, a su compañero Gerónimo Rivera, para el único gol del encuentro.
Sin embargo, lo que fue más llamativo de la situación vivida con Cambeses, fue lo que reveló el árbitro Merlos, luego del partido.
"Cuando lo fui a ver, él no me contestaba, le pegué un par de cachetadas ahí y me dice que 'mi mamá no me deja', entonces digo, no está bien y lo hice atender", señaló el árbitro a los colegas de ESPN.
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Luego, el médico de Banfield, Santiago Fayanas, explicó que Cambeses "tuvo una conmoción cerebral por un golpe, por lo que hizo una pérdida de conocimiento muy leve. Cuando lo fuimos a ver estaba bien, respondía a las preguntas. Se largó a llorar porque se puso un poco nervioso. El protocolo en estos casos es hablar con el jugador, a ver si está ubicado en tiempo y espacio", señaló el médico del plantel del "Taladro".