Fue un crack del fútbol italiano de los 90. Amigo de Batistuta y Zanetti, se hizo fanático de Boca y compró un campo en un pueblito de Buenos Aires. Sus vacaciones son en Argentina.
El ídolo del fútbol mundial que hace 30 años vacaciona en Argentina
La República Argentina es un país maravilloso, que atrae todos los años millones de turistas que recorren los rincones del país y, muchos de ellos, lo eligen para establecer su hogar. También es normal ver que figuras del deporte, en su mayoría argentinos, elijan nuestro país para emprender.
Sin embargo, es extraño ver por las calles de un pueblo argentino a una figura internacional del fútbol, que eligió un campo en Buenos Aires para pasar sus vacaciones y al que en el pueblo ya adoptaron como uno más.
El ex futbolista italiano Roberto Baggio, ganador del Balón de Oro en 1993, es vecino del pueblito bonaerense de Rivera, que se ubica al oeste de la provincia, a 10 kilómetros del límite con La Pampa.
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En 1994, un mes antes del Mundial de Estados Unidos, Baggio decidió comprar un campo en Argentina, debido a amistades que tenía que lo hicieron conocer el país, del cual quedó enamorado.
Luego del Mundial, en donde Italia pierde la final con Brasil por penales, y Baggio erra el suyo, el ex Juventus y Milan arribó a Argentina por primera vez, para conocer su campo.
Facundo Moscoso es un vecino de toda la vida de Rivera y se hizo íntimo amigo y socio de Roberto Baggio. En diálogo con TN, Moscoso señaló que es habitual verlo a Baggio hacer actividades cotidianas, como ir a comprar, y el pueblo ya lo adoptó como un miembro más.
Baggio no reside permanentemente en Argentina, si no que viaja unas 2 o 3 veces al año, y se queda varias semanas cada vez, ya que eligió a Rivera como su lugar para vacacionar.
Roberto y Facundo Moscoso en el campo "La Chiquita".
Moscoso comentó que Baggio terminó comprando el campo allí, porque "La gente vinculada a una marca de la cual él aún es embajador le empezó a buscar lugares. Le mandaron a Italia varios VHS de diferentes campos con algunas características que él había pedido. Se quedó enamorado de uno de acá de Rivera que tenía un casco de estancia, una laguna propia y, además, estaba cerca del pueblo", comentó y agregó que "viene dos o tres veces por año y es su lugar para desconectar. Sus vacaciones son en Rivera. No le interesa ir a otro lado".
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La vida tranquila que le ofrece el pueblo de Rivera lo hicieron sentir cómodo al mítico goleador italiano, que marcó una época en el Calcio italiano, junto con Gabriel Batistuta, Ronaldo Nazario, Inzaghi y tantos otros cracks que hacían del fútbol italiano la liga más atractiva del mundo.
"Yo nací en Rivera y tengo una ferretería. Un día vino a comprar, nos pusimos a hablar y pegamos onda. Yo lo atendí, le dejé mi número de teléfono anotado en un papel por si necesitaba algo, y me llamó a las dos o tres semanas para ver si no lo podía ayudar en el campo. Se había quedado sin encargado y necesitaba una persona que le manejara las cosas. Así fue el inicio de nuestra amistad", explicó Facundo, vecino y amigo de Baggio.
En uno de sus tantos viajes a Argentina, Baggio visitó La Bombonera y se convirtió en fanático de Boca Juniors, equipo que tiene gran identificación con Italia. "Él es hincha fanático de Boca. La primera vez que vino al país vio un partido y se enamoró del equipo", relató su amigo Moscoso.
Lejos ya de su faceta de futbolista, Baggio es conocido por su marcado perfil bajo, lo que lo llevó a transitar un retiro tranquilo. En esa faceta, fue que eligió el campo "La Chiquita", como su hogar en Argentina.
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