El Lobo mendocino comenzó perdiendo, pero reaccionó a tiempo e igualó 1 a 1 con el Gallito. Gracias a la ventaja deportiva, avanzó a cuartos de final del Reducido y sigue en la pelea por el ascenso.
Gimnasia empató un partido caliente con Morón y avanzó a cuartos
Gimnasia y Esgrima de Mendoza igualó 1 a 1 este domingo frente al Deportivo Morón por los octavos de final del Reducido que definirá el segundo ascenso a la Liga Profesional, luego de que Belgrano de Córdoba se consagrara campeón y se quedara con el primer boleto a Primera, y se clasificó a los cuartos de final, donde ya están San Martín de Tucumán, Estudiantes de Caseros y Defensores de Belgrano.
El partido, válido por la primera fase del Reducido de la Primera Nacional, se jugó en el estadio Víctor Antonio Legrotaglie, con el arbitraje de Gastón Brizuela, quien tuvo que intervenir en el final expulsando a un jugador de Morón y a un suplente de Gimnasia.
Al haber terminado cuarto en la tabla de posiciones, el Lobo enfrentó al Gallito, que terminó octavo, y esa diferencia le permitió jugar esta serie como local y con ventaja deportiva, por eso el empate le alcanzó para avanzar a cuartos de final. Los cinco clasificados, sumados a San Martín de Tucumán (se clasificó directo por haber sido tercero), se ordenarán del 1 al 6, según la tabla de posiciones, y se enfrentarán 1 vs. 6, 2 vs. 5 y 3 vs. 4.
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Obligado a ganar, Deportivo Morón salió a presionar y así a los 11 minutos dio el primer golpe. La visita recuperó la pelota tras una presión alta y tras un remate que fue despejado por Fernando Bersano, Tobías Zárate recibió en soledad y con el arquero Tomás Giménez vencido, ya que se había tirado para intentar tapar el primer disparo, remató de primera para poner el 1 a 0.
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Pasando los 20, Gimnasia comenzó a tomar el control de la pelota y se fue adelantando en el campo de juego, hasta que a los 27 minutos Santiago Solari le dio un pase filtrado con exquisitez a Mario Galeano, quien quedó solo mano a mano con el arquero rival, pero se demoró y finalmente no pudo rematar.
Ante la embestida del Lobo, el arquero de Morón, Juan Martín Rojas, se tiró al piso simulando una lesión por la cual los médicos ingresaron a atenderlo y así la visita congeló el partido durante casi cuatro minutos y le bajó el ritmo al trámite, en el mejor momento del equipo de Luca Marcogiuseppe.
A los 38 minutos, Mario Galeano ingresó al área y al intentar controlar la pelota el defensor Cristian Paz la tocó con la mano y el árbitro Brizuela no dudó en pitar penal. Luego de las protestas de la visita, Leandro Ciccolini se hizo cargo de la ejecución a los 41 minutos y con una sutil definición puso el 1 a 1.
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En la segunda parte, con el correr de los minutos Gimnasia decidió cederle la iniciativa a Morón, que obligado a ganar no le quedó otra que salir a buscar el partido y dejar espacios atrás, por lo que Luca Marcogiuseppe apuntó a liquidarlo con alguna contra.
Sobre el final, en tiempo de descuento, el partido se calentó y Lucas Abascia le dio un cabezazo a Joan Juncos por el cual recibió la segunda amarilla y se fue expulsado, aunque la situación ameritaba una roja directa.
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Esa expulsión derivó en un tumulto al que se sumaron el resto de los jugadores, los suplentes y los integrantes de ambos cuerpos técnicos, con empujones e insultos para todos lados. Cuando las cosas se calmaron, el árbitro echó al arquero suplente de Gimnasia, Sebastián Giovini.
Ahora, el Lobo debe esperar a que se completen los octavos de final para conocer el rival que enfrentará, una vez más como local y con ventaja deportiva, en los cuartos de final.
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