Gimnasia y Esgrima superó por 2 a 0 a Independiente Rivadavia en un Víctor Legrotaglie repleto. Diego Mondino y Santiago Solari marcaron los goles.
El Lobo venció a la Lepra en un clásico inolvidable
Este domingo se jugó una nueva edición del gran clásico del fútbol mendocino y quedó en manos de Gimnasia y Esgrima, que venció por 2 a 0 a Independiente Rivadavia, se tomó revancha de lo sucedido en la Copa Argentina en febrero pasado y escaló en la tabla para afianzarse cada vez más en la zona de clasificación al Reducido por el segundo ascenso a la Liga Profesional.
El partido, correspondiente a la fecha 22 del torneo de la Primera Nacional, se jugó en el estadio Víctor Antonio Legrotaglie con el arbitraje de Héctor Paletta.
Con esta victoria el Lobo llegó a 35 puntos y le sacó tres de ventaja a la Lepra, para subirse además a la quinta posición de la tabla y afianzarse cada vez más en los puestos de clasificación. El Mensana estiró a siete partidos su racha invicta y cortó de la mejor manera su seguidilla de tres empates seguidos. El Azul, por su parte, cortó con una racha de siete sin perder, con cinco triunfos y dos empates, seguidilla en la cual había marcado trece goles y sólo recibido uno.
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Gimnasia salió más decidido y logró plasmarlo a los dos minutos de juego, cuando a la salida de un córner y después de un rebote, Diego Mondino encontró la pelota en el área y metió un derechazo cruzado para batir a Jorge De Olivera y poner el 1 a 0 en favor del local.
A los 14 minutos respondió Independiente Rivadavia con un aviso que paralizó a todos en las tribunas. Un centro desde la derecha encontró al goleador Matías Quiroga solo en el área, pero el cabezazo del Flaco se fue muy alto.
Gimnasia volvió a avisar a los 22 minutos, cuando Diego Mondino estuvo cerca de anotar su doblete y el segundo de Gimnasia. De Olivera dio un rebote que encontró al defensor otra vez en el área, pero esta vez su remate se fue muy desviado.
Llegando al final del primer tiempo, a los 41 minutos y después de una gran jugada de Garrido por la derecha, Matías Nouet recibió en el área y sacó un potente remate que se estrelló en el travesaño. El rebote le cayó a Joan Juncos y su intento se fue por arriba.
Justo cuando Independiente empezó a crecer en el campo de juego, con algunas ocasiones aisladas de peligro, a los 37 minutos el Lobo lo liquidó luego de una buena jugada que terminó con la pelota en los pies de Santiago Solari, quien con un derechazo cruzado estableció el 2 a 0.
A puro orgullo, después del cachetazo que significó el segundo gol, la Lepra salió con todo al ataque, buscando descontar para soñar con la remontada, mientras el Lobo se replegó para despejar todos los embates de la visita.
Así, los cuatro minutos que adicionó el árbitro se consumieron sin más emociones para que comience la fiesta en las tribunas del estadio Blanquinegro.
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En la próxima fecha, Gimnasia visitará a Ferro Carril Oeste en Caballito mientras que Independiente será local en el Bautista Gargantini frente a All Boys.
Fotos: Marcelo Carubin.