Con el arbitraje de un argentino, Turquía venció a Georgia en un partidazo

 Este martes, Turquía y Georgia protagonizaron un verdadero partidazo, con golazos, polémicas y un intento de empate desesperado que terminó en gol del contrario. 

Turquía ganó un partido chivo, ante una dura selección de Georgia, que vendió cara la derrota. Fue 3 a 1 para los turcos, con dos golazos extraordinarios. 

En un partido siempre parejo, donde los dos equipos atacaron mucho y generaron peligro, fue Turquía el que se pondría en ventaja y encontraría la apertura del marcador a los 25 minutos del primer tiempo, con una volea extraordinaria del defensor Mert Muldur, que se metió en el ángulo del arquero georgiano. 

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Sin embargo, a los pocos minutos llegó el empate de Georgia, a través del goleador Mikautadze, quien encontró un centro a rastrón y definió fuerte al primer palo del arquero turco, estampando el 1 a 1. 

De esta manera se irían al descanso, con Georgia creciendo en un partido muy parejo. 

Ya en la segunda mitad, la dinámica del partido no cambió. Georgia siguió intentando atacar las espaldas de los defensores turcos, con Khvicha Kvaratskhelia, el crack del Nápoli, como principal amenaza, mientras que Turquía buscaba controlar más el balón, con nombres propios como  Calhanoglu, Arda Guler y Kenan Yildiz.

Fue justamente Guler, el joven jugador del Real Madrid, quien volvió a poner en ventaja a Turquía, con un soberbio zapatazo de su botín zurdo, que se metió en el ángulo superior derecho de Mamardashvili, que nada pudo hacer. 

Con el 2 a 1, Georgia fue con todo a buscar el empate, pero no tuvo suerte y malogró varias chances de gol. Sobre el final del partido, el arquero georgiano fue a buscar el empate en un córner y casi lo consiguen. Tras un par de rebotes, le quedó la pelota a un georgiano, que remató y sobre la línea, cayéndose, un jugador turco despejó al córner de cabeza.

De ese segundo córner llegaría la sentencia final del encuentro. Córner mal ejecutado, rebote y contragolpe del jugador Akturkoglu, que había ingresado en el segundo tiempo y corrió solo, como el mendocino Gonzalo Pity Martínez ante Boca, para poner el 3 a 1 y desatar el festejo turco. 

Hubo un buen arbitraje del argentino Facundo Tello, que estuvo muy cerca de la jugada y no fue trascendental en el trámite del partido. 

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