La Fiera tuvo su partido homenaje en la cancha de Newell's, rodeado de amigos, con la presencia estelar de Lionel Messi y enfundado en una camiseta histórica de Diego Maradona.
Entre lágrimas y vestido "de Maradona", Maxi Rodríguez dijo adiós al fútbol
El volante Maximiliano Rodríguez tuvo este sábado su merecido partido homenaje para despedirse del fútbol profesional y lo hizo en una noche más que emotiva, con la presencia de grandes amigos, incluyendo al mejor futbolista del mundo, Lionel Messi, y en el que no pudo contener las lágrimas cuando le tocó hablar con las más de 40.000 personas que coparon el Coloso Marcelo Bielsa.
Durante el partido, que sirvió de excusa para homenajear a la Fiera, un símbolo no sólo de Newell's sino también de la selección argentina, con la que disputó tres mundiales y obtuvo un subcampeonato, se dio el gusto de jugar con sus hijas y sobre el final tuvo un regalo inesperado.
Benjamín Agüero, hijo del Kun y nieto de Diego Armando Maradona, ingresó al campo de juego para darle una camiseta de Newell's que vistió el 10 cuando pasó por el club rosarino, a principios de los 90, generando una explosión en las tribunas.
Enfundado en esa camiseta, Maxi terminó de jugar el partido y junto a su familia disfrutó de un video en el que se la vio a su mamá recordando cosas de su niñez, juventud y su carrera profesional, lo que provocó que no pudiera aguantar las lágrimas.
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Así, con los ojos vidriosos y la voz entrecortada, agarró el micrófono y le habló a los hinchas. Lo primero que hizo, fue agradecer a la gente "por el respeto con el Pocho Lavezzi y el Fideo Di María", dos jugadores muy identificados con Rosario Central que esta noche fueron ovacionados por la gente del clásico rival.
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"Gracias a todos por hacerme pasar una noche inolvidable. No alcanzan las palabras para decir lo feliz que estoy, se me hace muy difícil hablar", agregó claramente conmovido.
"No sé si me merezco tanto cariño, me están haciendo pasar una noche de la concha de la lora", prosiguió Maxi Rodríguez, mientras la gente lo ovacionaba desde las tribunas.
"También le quiero agradecer a Leo, que en el día de su cumpleaños vino hasta acá, agradecerle a toda la familia también que lo dejaron venir, lo acompañaron a pasar un momento conmigo, es una locura, amigos así es lindo tener en la vida", dijo sobre la presencia de Messi.
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Finalmente, se quebró y cerró "gracias por hacerme vivir un día inolvidable que no me lo voy a olvidar nunca. Gracias a todos los leprosos. Gracias", concluyó Maxi Rodríguez mientras los fuegos artificiales iluminaban la noche rosarina.
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