El estadio Monumental es el escenario elegido para la gran final de la Copa Libertadores, pero luego de la goleada que sufrió el equipo de Marcelo Gallardo en la semifinal de ida, Conmebol podría cambiar la sede.
Con River casi afuera, el Monumental no sería la sede de la final
Desde que comenzó la Copa Libertadores se sabe que la gran final se jugará en Buenos Aires, pero fue recién el viernes 4 de abril que la Conmebol oficializó que el estadio elegido para definir al campeón es el Monumental de Núñez.
Sin embargo, luego de que River Plate cayera por goleada en la semifinal de ida ante Atlético Mineiro, que se impuso por 3 a 0, los dirigentes de la Confederación Sudamericana están analizando cambiar de sede.
Si River no llega, entonces la final no se jugaría en el Monumental.
Al parecer, no sólo la derrota del equipo de Marcelo Gallardo puso en alerta a la Conmebol, sino también la goleada por 5 a 0 de Botafogo sobre Peñarol, dejando sentenciada la serie.
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Con este escenario, hay grandes probabilidades de que la final la jueguen Atlético Mineiro y Botafogo, dos equipos a los que, según entienden los organizadores del torneo, el Monumental les quedaría grande.
Con capacidad para 86.000 espectadores, el estadio de River no luciría lleno en esta hipotética final, una imagen que no quedaría bien para las transmisiones internacionales, y no quieren repetir lo sucedido en la final de la Sudamericana 2022, con un Mario Kempes que no se llenó en el duelo entre San Pablo e Independiente del Valle.
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Según medios brasileños, Conmebol ya inició el operativo mudanza para no tener imprevistos si se confirman los dos clubes brasileños como finalistas.
Y allí aparecen dos opciones: el estadio Libertadores de América, de Independiente, y el Estadio Único Diego Armando Maradona, de La Plata.
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