El ex River y Godoy Cruz fue detenido el lunes por ingresar a una casa con un arma de fuego.
Cirigliano negó los cargos y aseguró que tiene esquizofrenia
El ex futbolista de River, Ezequiel Cirigliano, negó los cargos en su contra ante el fiscal y aseguró que tiene esquizofrenia, en el marco de la indagatoria de la causa que se lo investiga tras ser detenido por ingresar con un arma de fuego a una casa ubicada en la localidad bonaerense de Caseros.
Tras los hechos, al ex Godoy Cruz se lo imputó por tres delitos: "Tentativa de robo calificado por el uso de arma de fuego, portación ilegal de arma de guerra y violación de domicilio".
Este martes, Cirigliano fue trasladado por la mañana a los tribunales de San Martín, y por la tarde, el fiscal de la causa, Favio Cardigone, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 7, le tomó declaración indagatoria.
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El acusado evitó responder preguntas, pero negó los hechos e indicó que tiene esquizofrenia, por lo que debe ser medicado, aunque dejó la medicación por su trabajo.
El fiscal de la causa incorporó la imputación por "tentativa de robo", ya que el sumario policial arrojó que Cirigliano fue visto en el patio trasero de una casa con un arma. También escucharon que alguien quiso abrir la puerta del lavadero de la misma.
A su vez, el primo de Cirigliano apuntó contra River al afirmar que el "problema" del futbolista "nace por el desarraigo del club que lo formó". Y siguió: "Su problema nace con el desarraigo del club que lo formó, que lo levantó y lo puso como capitán, como estrella, como figura a futuro. Y de repente, las respuestas, los malos tratos y la no contención hicieron que él cayera en un pozo depresivo".
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En diálogo con D Sports Radio, indicó: "El público lo conoce como un gran jugador, pero nosotros lo conocemos como familia y es una gran persona". Luego, continuó: "Toda la vida se dedicó a su familia, a la gente, a los amigos, de hecho nunca quiso dejar el barrio, sus amistades... Es una persona completamente ajena a lo que es la fama, la fortuna y el dinero".
"No es fácil para un chico de 20 años estar en una situación donde todos te alaban, donde te dicen que sos un genio, un fenómeno, un ídolo y de repente sos la peor persona del planeta", expresó.
"Ezequiel tiene una depresión que con el transcurso del tiempo es muy difícil de manejar. Por medio de la contención de la familia y amigos se fue levantando, se fue sintiendo más fuerte y pudo volver a jugar. Lo único que quiere hoy, como persona, es estar tranquilo y bien", concluyó.