Lautaro Carrizo participó por primera vez como juez de línea en un partido de Inferiores. Pertenece a ACAMA y su madre agradeció a la asociación.
Polémica por el debut de un árbitro de 14 años en la Liga Mendocina
Este fin de semana se generó una fuerte polémica en torno a la Liga Mendocina de Fútbol por el debut de un árbitro de tan sólo 14 años de edad, en un partido de Divisiones Inferiores entre Universidad y Deportivo Maipú.
Se trata de Lautaro Carrizo, quien debutó como juez de línea (en esa división sólo se juega con un árbitro principal y un asistente) pese a su corta edad. El colegiado pertenece a la Asociación Civil Árbitros Mendocinos Asociados (ACAMA), entidad que en sus redes sociales compartió la noticia con orgullo.
"Felicitamos a Lautaro Carrizo por su debut como asistente en un partido oficial de la LMF con tan sólo 14 años. Desde ACAMA estamos orgullosos de ser parte de este hecho histórico que seguramente marca el comienzo de una gran carrera. Te deseamos muchos éxitos y estamos con vos en este hermoso camino del arbitraje. ¡Ésto es ACAMA!", escribieron acompañando el posteo.
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Quien también manifestó su alegría fue la madre de Lautaro, Pamela Torres, que comentó dicha publicación: "Como mamá Lautaro estoy eternamente a ACAMA porque desde el momento cero darle su ayudo y su confianza para cumplir sus sueños, al igual que a los profesores, colegas y demás personas que lo han alentado y ayudado a poder comenzar su carrera ...ETERNAMENTE AGRADECIDA", escribió.
Una abogada consultada al respecto aseguró que la Liga Mendocina tiene juicios vigentes sobre la práctica arbitral como relación laboral encubierta, puesto que reúne las condiciones de relación de dependencia. De confirmarse eso, la relación laboral con un menor de 14 años no sería consentida por el derecho argentino.
No obstante, el Artículo 30 del Código Civil ampara la participación de un árbitro en un evento deportivo regulado, indistintamente si tiene o no menos de 18 o 16 años.
"Creo un error hacer jugar (por dirigir) un menor de 14 años. Una vez jugó un chico de 15 años en la Liga, lo autorizaron sus padres y tuvo problema en Lavalle: le pegaron. Ese chico no vino más, desapareció", relató un referente del arbitraje mendocino, quien agregó para finalizar: "La carrera arbitral es muy larga y tenés conocer bien las reglas de juego porque lo más importante es su aplicación y conocimientos. Este niño puede ser un bocho en la lectura de la misma, pero falta lo primordial: autoridad y personalidad y que puede demostrar a esa edad un chico de tan solo de 14 años".