El golfista de 45 años no recuerda lo sucedido. La policía no le hizo el control de alcoholemia.
Tiger Woods iba al doble de la velocidad permitida cuando volcó
La investigación por el accidente automovilístico que sufrió Tiger Woods llegó a su fin, aunque algunos detalles quedaron inconclusos. El deportista salvó su vida de milagro.
De acuerdo a la Policía de Los Ángeles, el golfista estadounidense sufrió el incidente por exceso de velocidad. De hecho al momento del percance iba al doble de lo permitido. Pese a eso las autoridades no presentarán cargos ni citaciones.
La investigación arrojó que al momento del accidente vial, Woods manejaba su SUV Génesis GV80 a 140 kilómetros por hora, previo a perder el control del vehículo, salir de la ruta y dar varios tumbos, a la altura de Ranchos Palos Verdes, en California.
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Una de las teorías fue que el golfista pisó el acelerador cuando en realidad había querido frenar. No obstante, el multicampeón no fue sometido al control de alcoholemia porque "no había indicios de que estuviera drogado o bajo los efectos del alcohol", explicaron desde la jefatura del sheriff de Rolling Hills Estates.
Pese a eso Tiger no recordaba lo sucedido al momento de ser rescatado.
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Woods, de 45 años, terminó con una fractura en una de sus piernas en un vehículo que cuenta con 10 airbags. El propio deportista autorizó a que los resultados de la investigación fueran públicos.
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