La aparición del cuerpo de Santiago Maldonado, primicia que dio ayer el Post, generó un fuerte impacto en el oficialismo. A quiénes impacta y por qué. Desaciertos y dudas.
Por qué la aparición del cadáver de Maldonado golpea al macrismo
Este martes, el Post reveló la triste primicia: el cuerpo que fue hallado por buzos tácticos de la Prefectura Naval Argentina durante un rastrillaje en el río Chubut es el de Santiago Maldonado, el joven desaparecido desde el 1º de agosto en medio de un operativo de Gendarmería.
La confirmación se dio a través de dos fuentes de información consultadas por este diario: una del propio juzgado de Esquel y la otra de la Casa Rosada.
En ese contexto, la “oficialización” de la información será apenas cuestión de horas. Por caso, diario Página/12 reconoce en su edición de este miércoles: “En el Ministerio de Justicia confirmaron que iban a esperar a que hablara el nuevo juez, Gustavo Lleral, pero indicaron que quienes estaban en el lugar aseguraban que se trata de Santiago Maldonado”.
Diario La Nación también lo reconoció tibiamente: “Hallan un cuerpo en el río Chubut y todo indica que es el de Maldonado”.
A su vez, Radio Mitre, del grupo Clarín, confirmó el hallazgo: “El cuerpo de Santiago Maldonado ya se encuentra en la morgue de Esquel”, tituló anoche.
Como sea, de acuerdo a fotografías a las que tuvo acceso el Post —una de las cuales circuló por las redes sociales—, todo indica que se trata del joven Maldonado. No solo por el peinado y las rastas que lo caracterizaban, sino además por la campera celeste que portaba el día que desapareció y que le había sido prestada por el mapuche Matías Santana (N. de la R: la decisión editorial de este diario fue no publicar ninguna de las imágenes).
A su vez, por lo que pudo saber este diario, el hermano del artesano de 28 años, Sergio, se quebró delante del juez Lleral y habría reconocido detalles de su hermano que terminaron de refrendar las confirmaciones.
Sin dudas ya de que, lamentablemente, se trata de Maldonado, los interrogantes que se aproximan pasan por otro lado: ¿Cómo es que su cuerpo apareció en un sitio que ya había enviado a rastrillar el anterior juez, Guido Otranto? ¿Por qué no ostentaba la típica hinchazón de alguien que estuvo en contacto con el agua durante más de 70 días?
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Según informó ayer mismo la Fiscalía Federal de Esquel a través de un escueto comunicado, el cuerpo fue encontrado boca abajo sobre ramas de sauces en la margen de la ribera más cercana a la ruta 40, a 300 metros del lugar donde ocurrió la persecución entre gendarmes y miembros de la comunidad mapuche el 1º de agosto pasado.
En dicho marco, la Gendarmería ha quedado en el centro de todas las sospechas y el gobierno en un lugar más que incómodo.
Respecto de lo primero, el pasado 24 de septiembre el Post dio a conocer detalles de la investigación que complicaban a dos uniformados de esa fuerza, uno es el sargento Sergio Sartirana, que conducía una de las camionetas Ford Ranger blanca “que lleva consigo un extraño bulto envuelto en bolsas de consorcio (¿Maldonado?)”, de acuerdo a la nota de marras.
El otro es Emmanuel Echazú, “el efectivo que luego terminó apedreado y a quien se presume como posible asesino de Maldonado”, también según el artículo de este diario.
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Al igual que los referidos gendarmes —dicho sea de paso, hay otros implicados, incluso en lo que respecta al encubrimiento— quien deberá dar explicaciones es Pablo Noceti, jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad, quien apareció de manera suspicaz junto a los uniformados el día del desalojo donde habría desaparecido Maldonado.
La pata política
Respecto de lo segundo, de las responsabilidades políticas, hay media docena de funcionarios que deberán dar las pertinentes explicaciones por no haber estado a la altura de las circunstancias.
A la cabeza aparece la figura de Patricia Bullrich, ministra de Seguridad de la Nación, quien defendió a mediados de septiembre en el Senado de la Nación a la Gendarmería y afirmó: "Yo no voy a hacer la injusticia de querer tirar a un gendarme por la ventana" y de "echarle la responsabilidad".
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Luego aparece el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, quien también evitó acusar a esa fuerza poco antes de afirmar que "no hay ningún indicio que demuestre que sea una desaparición forzada de personas”.
El ministro de Justicia, Germán Garavano, también quedó enchastrado al fustigar a las entidades de los derechos humanos que reclamaban la aparición con vida de Santiago y que se reunieron con el Gobierno: "Tiene que ver con la campaña. Es una pena que los organismos de DDHH, que sabemos algunos tiene afinidad con la expresidenta y el Gobierno anterior, que se sabe que esto los termina desprestigiando”, dijo.
Marcos Peña, el jefe de Gabinete, llegó a decir en el Congreso, en plena discusión con Juan Cabandié por el caso Maldonado, una frase brutal: “Estamos orgulloso de nuestras fuerzas de seguridad”.
Sin embargo, la más complicada es Elisa Carrió, la principal socia política del macrismo, que llegó a asegurar que "hay un 20 por ciento de posibilidades de que (Maldonado) esté en Chile". Por si fuera poco, advirtió que habría que pedirle perdón cuando apareciera el cuerpo del artesano.
Frente a lo antedicho, en estas horas el presidente Mauricio Macri evalúa qué hacer.
¿Amerita hablar ante la ciudadanía? ¿Es pertinente emitir un comunicado? ¿O es preferible que hablen los funcionarios de las áreas de rigor?
La preocupación oficial ha llevado a que la Policía Federal ordenara acuartelar en estas horas a todos los cuerpos de esa fuerza para estar listos en caso de tener que accionar ante eventuales disturbios.
“Por disposición del Comando Institucional y hasta nueva orden, quedan suspendidos los francos de servicio para todo el personal. Ello incluye al numerario afectado a los servicios internos de cada unidad (…) Cada dependencia deberá extremar las medidas de seguridad en cada puesto de vigilancia a su cargo”, refiere el documento, dirigido a la Dependencia del Cuerpo de Guardia de Infantería, al de Policía de Tránsito Federal, al de la Montada y a los Grupos Especiales G.E-1.
Colofón
Finalmente, debe mencionarse la pata electoral, ante la cercanía de las elecciones del próximo domingo 22 de octubre, algo que por ahora no parece preocupar al oficialismo de turno.
"Es doloroso, como toda muerte, pero electoralmente el caso Maldonado es neutro", dijo al respecto una alta fuente del gobierno de Mendoza al Post en las últimas horas.
En otro orden de cosas, en estricto off the récord otro dirigente muy cercano a Macri puntualizó a este diario: "Apareció y eso es bueno, en una Argentina donde la historia es que los gobiernos no buscan y nadie aparece".
Como puede presumirse, las próximas horas serán reveladoras en todo sentido, principalmente a nivel político. La historia Argentina acaba de escribir otro triste capítulo. Y van…