La cooperativa existía: aparecieron los lotes de la política

Varios ex funcionarios invirtieron en lotes de barrios privados de Guaymallén. También la esposa de Lobos. Las operaciones sospechosas.

La cooperativa existía: aparecieron los lotes de la política

Por:Ricardo Montacuto
Director Periodístico

La esposa del ex intendente peronista Luis Lobos, Claudia Sgró, el ex diputado demócrata Jesús Riesco, el ex concejal demócrata de Guaymallén Ariel Rinaldi, y otros ex funcionarios, son poseedores de costosos lotes en emprendimientos inmobiliarios de  barrios privados de Guaymallén, que irían de los diecisiete mil dólares a por los menos cuarenta mil cada uno, según los metros cubiertos y la ubicación. Tres de estos barrios son propiedad de uno de los socios de una firma vinculada a otra, contratista de la comuna. Se trata de una empresa investigada por el alquiler "trucho" de una planta asfaltadora a la Municipalidad.

A este entramado oscuro nos referimos las innumerables veces que escribimos sobre la "cooperativa política" de Guaymallén, que se ha servido de las arcas públicas municipales, nacionales y provinciales como se le ha dado la gana. Hasta que el 4 de diciembre de 2014, este medio publicó la profusa investigación "Así se enriquece un intendente". 

La documentación que acredita la propiedad de los lotes en manos de la "cooperativa política" figura en el expediente original del Caso Lobos, la investigación publicada por este diario. Y fue aportada entre el 26 de abril y el 2 de este mes, quince días atrás, por las propias empresas administradoras de los barrios Sol Andino I, II y III y Nautilus, a la Unidad de Delitos Complejos que investiga a Lobos por una importante cantidad de delitos: fraude, administración fraudulenta, ñoquis, y hay además causas federales por evasión, lavado y enriquecimiento ilícito. El fiscal Juan Manuel Bancalari está a cargo de la mayoría de las investigaciones. Y ahora deberá seguir la ruta de aprobación de todas las factibilidades y servicios de estos emprendimientos inmobiliarios relacionados a la política. Tiene una pista: el huevo de la serpiente estaba en el Concejo Deliberante de Guaymallén.

El clan Lobos, camino a declarar.

El ex intendente Lobos ya está imputado por el alquiler fraudulento de maquinarias y camiones, y por el caso de la empleada doméstica "ñoqui" que trabajaba en casa de su suegra, sin saber que era "empleada" municipal. El entramado de relaciones es sorprendente. Hay que recordar que la suegra de Lobos fue "ñoqui" a su vez del ex diputado Jesús Riesco, que ahora aparece con lotes de la contratista en Guaymallén. Todas fueron revelaciones aportadas por el POST a lo largo de un año y cinco meses, lo que lleva de investigación el caso en varios expedientes penales. En el medio, Lobos perdió las elecciones, fue doblemente imputado junto a varios de sus funcionarios, también su esposa, su suegra y una sobrina recibieron imputaciones, y ayer se supo que fue declarada su cesantía -y la de su mujer Claudia Sgró- como agentes municipales por la retención y sustracción de expedientes municipales y factureros originales de por lo menos una empresa contratista. Es fácil deducir lo que hicieron. Y ahora aparecieron los lotes. La "crema" del negocio político-inmobiliario. Esas tierras prueban la existencia de una cooperativa de favores mutuos que ha sido denunciada varias veces por el concejal del FIT Federico Telera.

El fiscal Bancalari había enviado oficios a las empresas propietarias de tres de los emprendimientos inmobiliarios más importantes de Guaymallén, porque en la denuncia original presentada por el FIT y el grupo de abogados contra Lobos, su esposa y el resto de los funcionarios, los letrados pidieron investigar quiénes eran los dueños de los lotes en los barrio Nautilus, y Sol Andino I, II y III. Y las respuestas aparecieron este año. Ambas empresas contestaron los oficios y dieron los nombres. Ahora, será tarea de la justicia dilucidar cuántos "testaferros" hay en esos listados. Aunque algunos, no tuvieron ningún cuidado.


Los felices poseedores

Algunos de los poseedores de lotes en estos barrios, apuntados como reservorio de "la cooperativa" política, no han tenido remilgos en aparecer con sus nombres, y hasta son vecinos. El ex diputado demócrata Juan Jesús Riesco es propietario del lote C12 en la manzana C del emprendimiento Sol Andino I. Su "pollo" político, el ex concejal Ariel Rinaldi, posee los lotes C13 y C14, y junto a su esposa Natalia Jimena Fernández, y es propietario de dos lotes más en la manzana D, con las numeraciones 16 y 17. ¿Cómo hace un concejal al que sólo se le reconocen diez años de empleo público, para comprar cuatro lotes en los barrios más codiciados de Guaymallén?

Jesús Riesco, cuando asumía como autoridad de la Cámara de Diputados.

El ex diputado Riesco, de fiesta.

Rinaldi es el "cerebro" heredero de la pata demócrata de la cooperativa, y lo investigan por la explotación de "ñoquis". Luego, en la misma manzana, aparece un médico cardiólogo. Y en el lote C16, contiguo, la propietaria es Claudia Sgró, esposa de Lobos.  ¿Habrá pagado el terreno? ¿O será un "pago" por algún favor? Lindo barrio. El lote siguiente pertenece a un fideicomiso que la justicia investiga, porque estaría integrado por más personeros de la "cooperativa" de negocios de Guaymallén.

A veces la familia crece, o hay que invertir algún pesito, o las riquezas acumuladas no alcanzan. Claudia Sgró fue la "adquiriente" también del lote 79 del barrio Nautilus, otro de los emprendimientos "famosos" en Guaymallén por su relación con la política. El presidente de Nautilus es Antonio Fernández. Entre  MCL Group- y Fernández, habría una relación que los denunciantes pidieron investigar. Entre ellos, hubo una compraventa de una empresa en San Luis.

Hay más nombres conocidos en la lista. Familiares de concejales peronistas y radicales, que están en proceso de chequeo. Algunos de los titulares de los lotes, podrían ser homónimos, y otros, parientes directos de ex funcionarios de la comuna. Hasta una ex reina nacional de la Vendimia aparece en el listado. También varios empleados municipales de Guaymallén, que no podrían explicar la compra de semejantes terrenos. Por eso, tanto la Municipalidad como el fiscal Bancalari van a cruzar los datos.

Sin embargo, el ex funcionario que más terrenos posee en uno de estos barrios, en este caso en Nautilus, no es de Guaymallén, pero sí es muy conocido. Se trata de Mario Alfredo Granado. Fue subsecretario de Hacienda de Celso Jaque. Y Después de ser Secretario de Hacienda de Luján de Cuyo, en la gestión de Carlos López Puelles, fue al Tribunal de Cuentas. Lo suspendieron el mes pasado a pedido de Omar De Marchi, el nuevo intendente de Luján, por irregularidades. Previsor, Granado tiene diez lotes en el Barrio Nautilus. 

Mario Granado.

El ex funcionario es contador y antes ha trabajado como autónomo, y tal vez podría explicar el gasto. Pero la inversión ha sido realmente importante. Además, sus lotes están en manzanas distantes dentro de Nautilus. ¿Vivirá en diez casas, o compró para alguien? ¿O es sólo una inversión para alquilar? Son barrio con codificación de categoría. Nadie construye para alquilar a 30.000 pesos.

El dueño de los barrios Sol Andino

Desde los inicios de la investigación sobre el clan Lobos, los barrios Sol Andino aparecieron en algunos testimonios. Pero un año y cinco meses después de la denuncia, aquel dato que este diario publicó cuando tuvo la certeza, en 2015, se confirmó con la prueba documental conseguida por Delitos Complejos. Los muchachos de la "cooperativa" tienen tierras en los barrios de MCL Group.  A su vez, este  grupo es el verdadero propietario de Wanka, la firma investigada por el alquiler trucho de una planta de asfalto a la Municipalidad. Y a la vez, tienen algún terrenito en Nautilus, de Antonio Fernández, un hombre a quien le faltó negar la relación con Lobos, ante el papa Francisco. Todos estos datos ahora forman parte del expediente principal. Queda ver qué otras "sorpresas" depara el listado que MCL Group y Nautilus han debido aportar al fiscal Bancalari.

Ya se sabe, en Guaymallén estuvo de moda ser "inversor" inmobiliario. Y si no, pregúntenle a los "muchachos" de la cooperativa.