Estuvo preso en Mendoza, volvió a asesinar y lo condenaron a perpetua
La Justicia condenó a prisión perpetua por homicidio calificado y femicidio a Rubén Recalde, un mecánico sindicado como "el asesino serial de Junín" de dos mujeres que atendían comercios dedicados al público infantil.
La decisión fue tomada por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Junín, que -sin dar a conocer los fundamentos- dispuso la perpetua para Recalde por el "homicidio criminis causae en concurso real con abuso sexual" de Sandra Colo, de 43 años, y el "homicidio criminis causae" y "femicidio" de Paola Tomé, de 38 años.
La fiscal Vanina Lisazo definió al acusado como un "asesino serial" y advirtió en base al informe de tres peritos: "A Recalde no le importa matar porque para esta clase de psicópatas las personas somos como una mesa que si les molesta las corre".
El defensor oficial Silvio Acerbo había reclamado su absolución por considerarlo "inimputable", aunque, subsidiariamente, pidió una condena menor por homicidio en ocasión de robo.
"Estamos conformes, sentimos que se hizo justicia. Esperemos que no vuelva a salir de la cárcel", dijeron los familiares de las víctimas, luego de que Recalde escuchara impávido su sentencia.
Ambas mujeres era solteras, sin hijos, y atendían comercios dedicados al público infantil.
Sandra Colo fue golpeada y estrangulada con un pedazo de tela el 16 de agosto en 2012, en el salón de fiestas infantiles donde trabajaba.
Y Paola Tomé fue asesinada de la misma forma un año y medio después, el 16 de enero de 2014, en su local de venta de ropa de bebes.
Los casos se investigaron en forma separada hasta que se prestó atención a las muestras de ADN de ambos escenarios que indicaban que había un mismo atacante.
Recalde había cumplido prisión en Mendoza por violación y asalto y durante el juicio oral que finalizó este viernes declaró una mujer que sobrevivió a un ataque del imputado y relató detalles que coincidían con rasgos de los crímenes de Tomé y Colo.